La electrificación del transporte no solo se trata de reducir emisiones, sino también de aprovechar oportunidades de negocio inteligentes. A continuación, te presentamos cuatro formas en que tanto los municipios como las empresas privadas en Chile pueden monetizar la instalación de cargadores en Modo de Carga 2:
1. Cobros por el servicio de carga
Una de las formas más directas de generar ingresos es cobrando a los conductores de vehículos eléctricos por la electricidad que consumen. Supongamos que se cobra $250 CLP por kWh y que el promedio mensual de uso de un VE es de 30 kWh en un cargador público. Esto se traduce en $7,500 CLP por VE al mes, o $90,000 CLP al año. En una ciudad con 100 usuarios regulares, los ingresos anuales podrían alcanzar los $9,000,000 CLP solo en tarifas de carga. Este número puede incrementarse significativamente con más usuarios o más cargadores.
2. Cobros por estacionamiento
Además de la electricidad, se puede cobrar por estacionar en lugares designados para VE. Si se cobra $1,000 CLP por hora y la sesión de carga promedio dura dos horas, cada sesión genera $2,000 CLP. Si un cargador se utiliza dos veces al día, se generarían $4,000 CLP diarios o $1,460,000 CLP al año. Con solo 10 cargadores, los ingresos anuales podrían alcanzar los $14,600,000 CLP únicamente por tarifas de estacionamiento.
3. Publicidad y patrocinio
Los cargadores EV en Modo de Carga 2 también pueden servir como plataformas publicitarias, ofreciendo a las empresas locales la oportunidad de pagar por espacio publicitario en los cargadores. Una estimación conservadora de $500,000 CLP por cargador al año podría generar $5,000,000 CLP anuales con 10 cargadores. El patrocinio es otra opción rentable que puede aumentar aún más estos ingresos.
Con costos de mantenimiento relativamente bajos y el creciente número de VE en las calles de Chile, queda claro por qué esta inversión está ganando popularidad. ¿Listo para convertir esos lugares de estacionamiento en centros de ingresos? ¡Es el momento de conectarse y cargar!